CONSIDERACIONES SOBRE "LA CIUDAD DE LONDRES"

Llevaba un tiempo sin hablar de viajes y ciudades, una de mis pasiones. Ya he escrito sobre alguna británica, como Liverpool, aunque fuese para hablar de fútbol y sensaciones, pues no hay cosa más importante en un viaje que conservar recuerdos de momentos imperecederos.

Y en Londres, he estado en varias ocasiones y por diferentes motivos, aunque siempre han sido por ocio y nunca por trabajo, así que mi visión siempre será la de "turista accidental", como bien decía aquella película de Lawrence Kasdan.

La he visitado por última vez para ver en Stamford Bridge, las semifinales de la Champions League entre el Chelsea y el Atlético de Madrid, pero en otras ocasiones he asistido a musicales, conciertos de rock, ópera en el Covent Garden o visitas a sus museos, desde aquella primera vez a finales de noviembre del 2000, donde llegué con alguien que fue muy importante en mi vida y con la que, desgraciadamente, he perdido casi todo el contacto. ¡Así es la vida!.

Me encantan sus pubs, su ambiente cosmopolita, pasear por Camden y allí por supuesto comprar en sus impactantes tiendas donde hay casi de todo. Siempre he deseado llegar con la cartera llena de billetes, una maleta vacía y regresar con la maleta llena y la cartera vacía. Lástima no ser rico y tener demasiadas aficiones que me obliguen a ahorrar muy poco. En Camden existen además, un montón de pubs muy entrañables o con mucha historia, como el mítico "The Dublin Castle" donde empezaron los Madness o el extraño "The End of the World" de dimensiones colosales y en donde se escucha rock entre su decoración tradicional.

Cosas como esta, pienso que hacen de Londres la capital de Europa, incluso por encima de París, aunque la capital del mundo, es probable que sea Nueva York. Pero que grande que museos de tanta importancia como la National Gallery, la Tate Gallery, La Modern Tate o ese monumento al saqueo más absoluto llamado British Museum sean gratuitos. Es algo impensable en casi todos los países, dedicados a convertir el arte en una forma de negocio. Lo veo lícito pero es agradable poder observar todas esas obras maestras "sin rascarse el bolsillo". Luego llegaran nuestros "queridos" políticos patrios hablando del arte para todos y cosas similares pero en ningún programa electoral está volver a la gratuidad de los museos.

Seguiré visitando esta ciudad poderosa más veces. Estoy seguro de ello. Y más pensando la cantidad de gente que ha tenido que emigrar por la falta de trabajo en España y que me encantaría visitar. La ventaja es que así seguiré conociendo un poco más de su apabullante historia y calles. Desde La Torre de Londres, al espíritu de Jack "El Destripador" en Whitechapel, pasando por los pubs donde comenzaron bandas tan señeras como Iron Maiden. La pena es que Londres se convierta para muchos compatriotas no en una forma de disfrutar su ocio sino en la ciudad donde no les queda más remedio que vivir, echando de menos sus familias y sus tierras. Aunque para otros sea la oportunidad de residir en una de las ciudades más cosmopolitas del mundo y vivir unas experiencias que marcaran sus vidas. Eso seguro. Así que para todos mis amigos "londinenses" va dedicada esta entrada.