viernes, 11 de enero de 2013



CONSIDERACIONES SOBRE LA "CIUDAD DE LISBOA"

"Lisboa ofrece múltiples posibilidades para un noble suicidio". Esta frase que de tanto repetirla he hecho mía, es en realidad de Antonio Tabucchi, el escritor de "Sostiene Pereira", entre otros y a pesar de que nunca aparecería en ningun catálogo de agencia de viajes, resume muy bien lo que siento cuándo llego a la capital de Portugal. Y es que el espíritu de Fernando Pessoa se suele adueñar de mi cuerpo y deambulo por sus calles sumergido en profundas reflexiones sobre el sentido de mi existencia y de la vida.

Y es que lugares como el mítico Elevador de la Gloria que de forma muy lenta te conduce al Mirador de San Sebastián o el tranvía 28 que te deja a los pies de los Miradores de Santa Lucia o Gracia. Imagino que cualquiera solo verá una vista bonita de la ciudad, en cambio lo que veo es una subida renqueante en el vetusto tranvía que te deja al borde de un abismo, de un precipicio, del final de algo que acaba o que ni siquiera ha comenzado y así no es extraño que cuándo he sufrido algún revés amoroso serio o mi estado de ánimo exige un tiempo para mi, viajo a Lisboa a inundarme de "saudade" y el semi heterónimo de Pessoa, Bernardo Soares me abduzca una vez más.
Quitando los barrios de la "outra banda", de día me gusta mucho pasear entre las empinadas cuestas de Alfama, bordeando el Castillo de San Jorge o superando la "Sé" y llegar al Mercado de los Ladrones y al Mirador de Gracia. Allí suelo beber un vino y en silencio tomar el 28 hasta Rossio.
De Rossio, la Plaza de Figueira y el centro de la ciudad me encanta perderme entre las añejas Tabaquerías, que son bastante más que un estanco al uso, mientras contemplo relajado a los turistas haciendo cola en el Elevador de Santa Justa y a los lisboetas continuar su jornada laboral. Este es un buen momento para entrar en el Beira Gare en la Rua da Dezembro y tomar en su sabia barra, un caldo verde y la sabrosísima Bifana. No tengo claro, si como ellos aseguran es la mejor de Lisboa, pero es un lugar muy económico y que siempre me ha encantado.
Si el tiempo lo permite otra opción excelente es bordear el Tajo desde la Plaza de Comercio hasta llegar a Belem con su Monasterio y su célebre torre, pero antes se pasa por Cais do Sodré y uno puede llegar al puerto y ver llegar o partir los barcos, ¿hay algo más melancólico que esto?.
Baixa a la altura del Largo do Carmo con su Teatro San Carlos y su "Rua Douradores", donde se supone que Bernardo Soares veía la vida pasar siempre me han dado una nostalgía que apenas se mitiga tomando una cerveza en el Café A Brasileira, donde tienen la estatua de Pessoa sentado entre su decoración art decó.
Todo una experiencia, para acabar en el hermoso "Bairro Alto", con sus Casas de Fado inundadas de turistas entre los bares de copas. De hecho, es uno de ellos llamado Cantar de Camoes una fadista me dedicó el "Almas vencidas, noites perdidas" mientras saboreaba cada sorbo de un gin tonic con sabor a bruma y decadencia.
Sobre lo mucho que me gusta el Fado tendré que hablar en algunas otras consideraciones y sabiendo, como sé, que Teresa Salgueiro, la antigua cantante de Madredeus visita Cádiz en Mayo, esperaré hasta ese preciso momento para comentar una de las músicas más poderosas que he escuchado nunca. y es que aunque no sea fado, se asemeja mucho, "Ao longe o mar" es una de mis canciones favoritas.
Nunca entenderé el por qué me gusta tanto esta ciudad, pero si algín día me suicido, confío que no en los próximos cincuenta años, sin duda lo haría aquí. Aún así amo esta ciudad y como último detalle, una de las chicas mas "sexys" que he conocido en mi vida era de ahí. Eso también influye.

4 comentarios:

  1. Me gusta: hablas más de lo que supone para ti que de lo que es en sí. Ya comenté que EMHO este blog mejoraría si incluías menos objetivismo (datos fríos y verificables) y más sensaciones subjetivas.

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  2. Gracias. Intentaré seguir a la altura.

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  3. Yo me hice una foto con Pessoa: allí sentado en una silla junto a él.

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  4. Es en el Café "A brasileira".Lo comento en el post. Fotografía obligada.

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