miércoles, 10 de septiembre de 2014


CONSIDERACIONES SOBRE "EL SUEÑO DE ELLIS"

Película alabada por la crítica, ganadora de diversos premios en varios festivales, realizador de prestigio entre una minoría cinéfila y con ese marchamo de cine de calidad que algunas veces da cierto miedo. Esta vez es una de ellas, pues este "El sueño de Ellis" es un producto algo defectuoso.
Y no es que esté mal la cinta, ya que tiene sus cosas positivas y, por ejemplo, el arranque y el último tramo es espléndido, además de otros factores técnicos de indudable talento pero se pierde en una pretenciosidad inaguantable. Por lo menos para mi.

Historia simple pero eficaz. Dos hermanas polacas llegan al Nueva York de los años veinte, donde una será retenida por tuberculosis y la otra caerá en manos de un proxeneta que la obligará a prostituirse para pagar el "rescate" del hospital. Como ya he comentado, el inicio es fabuloso, con esas imágenes en la fila de inmigración, que recuerdan mucho al comienzo de "El padrino II" y el desenlace tiene ritmo y emoción. Lástima que buena parte del acto central sea de un aburrimiento total.
Y ese es el gran "handicap" del film. Se hace larga y pesada. Con situaciones que no avanzan, diálogos que pretenden ser trascendentes y solo se quedan en vacuos y una sensación de hastío difícil de superar. Dicho en "roman paladino": me aburrí "como una ostra" en buena parte de sus ciento veinte minutos y solo en algunos momentos me pareció entrever las virtudes de su director James Gray, quien no dudo su calidad como realizador, pues intenta mantener el tono pausado y visual que siempre me ha gustado y además la dirección de actores es muy competente, consiguiendo que los personajes resulten creíbles, desde el punto de vista de la cámara, por que los diálogos y el guión, que firma el propio Gray junto con Ric Menello, anulan buena parte de la pericia con la cámara. Y eso es imperdonable.
La parte técnica es admirable, con una fotografía preciosista del gran Darius Khondji, un señor que ha trabajado con Haneke, Fincher, las últimas de Woody Allen, Polanski, Wong Kar-Wai o Bertolucci y que vuelve a realizar un soberbio trabajo. El trabajo de ambientación, vestuario y dirección artística también destaca, a cargo de la veterana Patricia Norris y el casi debutante Pete Zumba. Banda sonora correcta del desconocido Christopher Spellman.
Aunque donde Gray si ha conseguido un notable es en el capítulo interpretativo, ya que los secundarios son magistrales pero el triplete protagonista es colosal, con un buen Jeremy Renner, un espectacular Joaquin Phoenix, demostrando el por qué es uno de los más sobresalientes de su generación y una Marion Cotillard que lleva el peso narrativo sin problemas y con una calidad actoral muy encomiable.
Envoltorio muy bonito para una decepción tremenda, lo mismo que me sucedió hace tiempo con "The master", curiosamente también protagonizada por Joaquin Phoenix y donde la forma parece cubrir el fondo, que queda bastante vacío e impreciso.
Lo que si me ha hecho gracia, es el nuevo alarde de los distribuidores al cambiar el título original, ya que de "The immigrant", "La inmigrante", ha pasado al opaco y metafórico "El sueño de Ellis", que intenta resumir las esperanzas de los recién llegados a la Isla de Ellis en Nueva York donde albergaban una vida mejor que en la destruida Europa, tras la Primera Guerra Mundial. He visto a lo largo de los años auténticas tropelías con las traducciones como aquella francesa de Colinne Serreau, "Romuald et Juliette", "Romeo y Julieta", que por arte de magía nos llegó como "Mamá, hay un hombre blanco en tu cama" o "An affair to remenber", "Algo para recordar", que en versión española se llamó "Tu y yo" y "Sleepless in Seattle", "El desvelado de Seattle", que curiosamente se tituló en España "Algo para recordar". O esto o la moda de dejar el nombre original sin traducir, aunque pensándolo bien quien iría a ver "Velocidad 2" con lo "chulo" que queda "Speed 2".



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