CONSIDERACIONES SOBRE "LAS BRUJAS DE ZUGARRAMURDI"

He comentado en alguna ocasión que no suelo ver demasiado cine español en las salas de cine, aunque en este tiempo haya dedicado entradas a "Blancanieves" y "Los amantes pasajeros". El motivo es el excesivo egocentrismo que demuestran los filmes pátrios, unas historias donde es complicado sentirse identificado y una uniformidad en el discurso que en algunas ocasiones llega a indignarme.

Por suerte, y a pesar de la irregularidad de su filmografía, Álex de la Iglesia es un director que me interesa y suelo acercarme a los estrenos de sus nuevas obras. Entre sus películas destaco sus maravillosas "Acción mutante" y "El día de la bestia", dos primeras cintas que nos dejaron a todos impactados. Del resto estaba muy entretenida, a mi juicio, "La comunidad" y poseen grandes momentos "Perdita Durango" o "Crimen ferpecto". El uno problema que siempre le he visto a De la Iglesia es lo mal que suele rematar las historias. Narraciones que suelen llevar un buen ritmo se convierten en delirios muy extraños y estrambóticos. Esta no iba a ser menos.

Tras un arranque espectacular, de lo mejor que he visto en el cine español en muchos años, llega un nudo interesante jugando con el fantástico, el terror y la comedia para concluir en un disparatado aquelarre, lleno de sinsentidos, escenas de rozan lo vergonzoso. Un delirio que es más que posible que no se necesitase. Pero como decía hace un momento, "Las brujas de Zugarramurdi" tiene una primera hora magnífica, muy divertida, en la que me reí bastante, y además sin ningún rubor, pues estaba completamente solo en el multicine al que asisto con asiduidad y que demuestra el talento que atesora con las imágenes el director vasco.

Y no solo de potentes imágenes vive el filme, pues el elenco de actores funciona a la perfección y a los "guapos oficiales" Hugo Silva y Mario Casas, hay que sumar las portentosas interpretaciones de Carmen Maura, Jaime Ordóñez, Pepón Nieto, Secun de la Rosa y sobretodo de Terele Pávez. La guapa es una aceptable Carolina Bang, que recuerda bastante los personajes de Sheri Moon Zombie en "La casa de los mil cadáveres" y "Los renegados del diablo". No se si se habrá inspirado en estas dos cintas de terror, pero además de este personaje, la fotografía de Kiko de la Rica, por otro lado fantástica, también recuerda bastante a la forma de entender el cine de Rob Zombie. Dentro de las interpretaciones me sobraron los papeles de Santiago Segura y Carlos Areces, pero imagino que al aparecer en el desquiciado final ayuda mucho. El resto de los secundarios mantienen el tono de excelente plantel y la parte técnica no desmerece, con esos primeros sesenta minutos tan magníficos firmados por el director y su habitual Jorge Guerricaecheverría, buen montaje, escenografía estupenda y acertada banda sonora, del para mi desconocido Joan Valent.

Recomendación para un público desenfadado con ganas de pasarlo bien. No es la gran obra maestra, pero mantiene un tono que ya quisieran la gran mayoría de "pelis" hispanas. Estoy seguro que algún día Álex de la Iglesia conseguirá una obra maestra, algo redondo, hasta ahora se acercó en "El día de la Bestia". Tengo la sensación que su hubiese rodado en los 60, hubiese estado a la altura de un Berlanga, pero es lo que tienen estos tiempos de pensamiento único, burlarlos es acabar fuera del sistema en una moderna forma de censura. Aún así, espero que funcione en taquilla, aunque estuviese solo en la butaca sin nadie alrededor.