viernes, 10 de mayo de 2013



CONSIDERACIONES SOBRE "OBLIVION"

 Ya he comentado con anterioridad, como en la entrada dedicada a "Un amor entre dos mundos", que soy un gran seguidor de las películas de ciencia ficción. Esta que nos ocupa, venía precedida por un impecable anuncio que había visto en los cines, pero como suele ocurrir, el "trailer" destripaba el argumento de la película y una extraña sensación de no cumplir las expectativas se adueñó de mi durante el visionado, en la sala semi vacía, donde acabé viendo "Oblivion"
Al parecer esta se basa en una diminuta novela gráfica, ya que tiene solo quince páginas, que firma su director Joseph Kosinski, cuyo único bagaje con anterioridad en la dirección cinematográfica había sido "Tron: Legacy". El filme se ve con bastante agrado y es muy entretenido, además se suma que aparte de mi acompañante y el que firma estas entradas, solo dos personas más poblaban la sala del Multicine donde proyectaban esta película y que no es el habitual al que acudo.
"Oblivión" es una superproducción bien realizada, con un reparto muy interesante, pero con un exceso de Tom Cruise durante su metraje, así que si alguien odia al abanderado de la Iglesia de La Cienciología, mejor que se quede en casa o vaya a disfrutar de algún otro título de la cartelera. Parte de ese reparto lo componen los solventes Morgan Freeman, Nikolaj Coster-Waldau, la muy enigmática y mujer de enormes pupilas Andrea Riseborough y la bellísima Olga Kurylenko, a la que pudimos disfrutar como chica Bond en "Quantum of solace". Además de los buenos efectos especiales, en su mayor parte visuales, la cinta contiene dos elementos que actúan muy a su favor, por un lado la impresionante fotografía del oscarizado Claudio Miranda, el mismo que firma "La vida de Pi", que consigue la unión perfecta entre los bellos parajes naturales, los interiores de estudio y los de "croma" y la impresionante banda sonora de la banda de música electrónica M 83, que nos devuelve a "scores" más añejos, al ser compuesta sin apenas ningún apunte orquestal, ni instrumento natural y solo utilizar sintetizadores en su totalidad. Un acierto, por lo extraño y arriesgado de la elección.
No puedo, eso si, dejar pasar por alto, que todo el buen trabajo previo, se escapa con un final bochornoso, que no es digno de lo que estaban ofreciendo, porque, si bien es verdad, que existen algunos errores científicos y algunas reacciones que no parecen normales o naturales, esto es una película y se pueden obviar para crear un buen conflicto dramático o dotar de su buena dosis de acción, pero su desenlace es tan absurdo y comparable al de engendros como "Independance Day". Y es una pena, al ser "Oblivion", una buena historia, que imagino que con los años se olvidará con facilidad. y es curioso porque "Oblivión" significa olvido en español. ¡Qué manía la de nuestros distribuidores con no traducir muchos títulos!.
Con tantos "drones", naves espaciales y tecnología punta, he descubierto que ésta se ha convertido en esencial en mi vida, ya que el lector habitual de esta bitácora, habrá comprobado que llevaba tiempo sin publicar nada, y eso es debido a que he estado bastante tiempo sin ordenador y solo pude escribir seguidas las últimas entradas del mes de abril en un ordenador que no es el mío. La tecnología ha conseguido que pueda expresar mis pensamientos sobre diversas materias con suma facilidad, saber de la vida de la gente de mi alrededor y de los que están más lejos y tener la posibilidad de conocer nuevas personas, pero también he comprobado con desagrado que tal vez consuma demasiado mi vida y que dependo de ello, tal vez en demasía. Y eso no es bueno, nada bueno, por lo que he pensado que voy a dejar de hablar de "Oblivion" y me voy a ir a la playa a terminar de leer la novela que tengo entre manos. Es muy buen plan.



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